viernes, 30 de septiembre de 2011

CAYENDOME


“No puedo salir, nunca imaginé un mundo así pero aquí estoy y estoy cayendo.
Quisiera llorar, desatar el sueño y saltar”


Mi vida pendulaba de mi casa al trabajo y del trabajo a mi casa, los pocos amigos que fui cosechando por diferentes razones se fueron yendo y yo quedándome solo.

Durante las horas laborales mi mente se despejaba al tener un mínimo contacto con mis compañeros de trabajo y con uno de ellos que entable una pequeña amistad y en mi casa usaba libros y películas como portales hacia diversos mundos e historias.

Pero al volver a la realidad, me daba cuenta que mi vida era solitaria y me confinaba en mi habitación ya que no tenia con quien compartir mi vida.

Hasta hace un año y casi cuatro meses atrás, cuando me puse de novio con ella, salte de ese sueño gris y comencé a compartir muchos momentos



http://www.youtube.com/watch?v=aVxtg8Rsj8g

2 comentarios:

  1. Se necesita al menos una razón para vivir, indudablemente esa razón es ella, la que le pone color a los sueños...

    Este pequeño relato dice mucho, más de lo que tal vez quiera decir :)

    Muy bueno.

    Un abrazo.

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